Albert Hofmann, el hombre que descubrió la droga alucinógena LSD hace 60 años, ha manifestado estos días que su uso médico debería estar permitido en determinadas circunstancias y pacientes, incluyendo los de tipo psiquiátrico.

Hofmann, que tiene hoy 97 años, realizó su descubrimiento de las propiedades alucinógenas del LSD (por lysergic acid diethylamide) en el laboratorio de investigación de la compañía farmacéutica Sandoz en Basilea (Suiza), en abril de 1943.

Años más tarde la droga se prohibió en todo el mundo –algo que le produjo “una tremenda tristeza”-, pero han sido muchos los que se han aventurado a “viajar” con esta sustancia en las últimas décadas.

Hoy, desde su retiro en Suiza, se declara a favor de que “los médicos puedan tener acceso a un uso terapéutico del LSD, como ocurre con la heroína y la morfina, porque el LSD tiene muchos usos potenciales. Pero sigue estando prohibido, a pesar de que muchos médicos quieren emplearlo para sus pacientes”. Algo que parece muy lejos de la realidad.