El precio del tabaco subirá un 6 % en Francia a partir de octubre como primera etapa de un plan sanitario que prepara el Gobierno, que se centrará en la prevención y medidas de ayuda a los fumadores.

«Frente a los 73.000 muertos al año que causa el tabaco en Francia, hay que desarrollar una verdadera política pública de salud que vaya más allá de una política de precios», señaló la ministra de Sanidad, Marisol Touraine, en declaraciones publicadas hoy por «Le Parisien».

Touraine avanzó que habrá una política de ayuda a los fumadores y de prevención «que permita centrarse sobre todo en los jóvenes, las mujeres embarazadas y las personas en situación de precariedad».

En concreto, «Le Parisien» indicó que el Ejecutivo incluirá en su plan contra el tabaco medidas como las cajetillas de cigarrillos «genéricas» con embalajes neutros que impidan al máximo diferenciarse a las marcas y también una menor visibilidad en los estancos.

Se estudia también ampliar los espacios en los que no se puede fumar y que la Seguridad Social cubra mejor los gastos de productos farmacéuticos y similares para dejar el hábito.

Para financiar ese dispositivo, se impondrá un impuesto de 200 millones de euros sobre los beneficios de las empresas tabaqueras.

La nueva subida del tabaco será de unos 40 céntimos por cajetilla, y se sumará a otras del mismo orden adoptadas en noviembre de 2010 y octubre de 2011. El precio de la marca más vendida quedará en 6,60 euros.