Malos tiempos para los cigarrillos electrónicos. Si no hace mucho más de un mes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) desaconsejaba el uso de este producto, es ahora la agencia que regula los medicamentos y productos sanitarios en EEUU, la denominada FDA, quien se plantea prohibir su venta ‘on line’.

La decisión se tomará tras finalizar una serie de reuniones que están realizando con fabricantes de cigarrillos electrónicos para escuchar sus propuestas sobre las medidas que esta agencia pretende realizar para regularizar la venta de estos productos. La misma FDA advirtió en 2009 que estos cigarrillos podría tener riesgos para la salud, tal y como ha señalado ahora la OMS, ya que no existen estudios suficientes sobre su seguridad y calidad.

Por estos motivos, la agencia estadounidense pretende mejorar ahora la normativa de esta industria. Mitch Zeller, director del Centro regulador de los Productos del Tabaco de la FDA, ha anunciado que espera tener lista una decisión el próximo mes de octubre. «Es cierto que son necesarias más investigaciones sobre los efectos en la salud de los cigarrillos electrónicos. Sin embargo, no necesitamos más estudios sobre si deberían o no incluirse en las regulaciones de la FDA», ha declarado.

La prohibición de la venta ‘on line’ evitaría que los cigarrillos electrónicos estuviesen al alcance de los menores además de mejorar el control del comercio de este producto.

Se estima que las ventas de cigarrillos electrónicos alcanzarán a finales de año los 1.000 millones de dólares, tan sólo en Estados Unidos, según informa el diario The Wall Street Journal, aunque esa cifra se podría multiplicar por 10 en tan sólo cinco años.

Elliot Maisiel, el presidente y el mayor accionista de la empresa de cigarrillos electrónicos ‘Fin Branding Group’, ha declarado que esta regulación no le genera ningún temor debido a la demanda que hay de estos productos. Su empresa ha vendido más de 40.000 unidades a escala nacional, y estima unos ingresos de 60 millones este año.

El principal competidor del tabaco tradicional son ahora los cigarrillos electrónicos, lo que está haciendo que muchas compañías tabacaleras están introduciéndose dentro de esta industria.

Los expertos en salud señalan que no hay manera de conocer la cantidad de nicotina que se inhala con estos cigarrillos, porque varía en función de la marca. Además, pueden contener otras sustancias, como el glicol de propileno, que pueden ser irritantes y tóxicas.