La nueva normativa, que entrará en vigor el 15 de noviembre, surge como refuerzo de la ley antitabaco que entró en vigor en junio, primer paso hacia una prohibición total del consumo de cigarrillos en lugares públicos. Las mayores multas serán para quienes fumen en parques infantiles, según la agencia RIA Novosti.

El Gobierno calcula que con esta nueva ley podrían salvarse al año hasta 200.000 vidas y su intención es aumentar las medidas de control en los próximos meses. En 2014, entrará en vigor una prohibición total del tabaco en restaurantes, trenes y hoteles.

Las autoridades rusas quieren controlar no sólo el consumo de cigarrillos sino también su venta, multando por ejemplo a quienes vendan tabaco a menores. Asimismo, la nueva normativa marca qué establecimientos pueden dispensar productos relacionados con el tabaco y fija 40 rublos (90 céntimos) como precio mínimo para la cajetilla.