Tomar éxtasis conduce al debilitamiento potencialmente mortal y la ruptura de la arteria de la médula espinal, según advierte un equipo de médicos en un artículo en Journal of NeuroInterventional Surgery.

Los médicos descubrieron uno de estos aneurismas en un adolescente previamente sano que había tomado éxtasis o MDMA. La mañana posterior a la noche en la que lo tomó, se despertó con dolor de cabeza, dolor de cuello y espasmos musculares y, tras una semana con estos síntomas, de repente empeoró, con la aparición de náuseas, que lo llevaron al servicio local de urgencias.

Una semana después, el adolescente fue trasladado a una unidad de neurocirugía, donde se le detectó un aneurisma de 2 x 1 mm en la parte izquierda de la arteria de la médula espinal en la parte posterior de su cuello. El aneurisma fue tratado junto con la porción debilitada de la arteria, de forma que el adolescente se recuperó por completo.

Los autores recuerdan que el consumo de éxtasis ya se ha relacionado con graves complicaciones sistémicas y neurológicas, incluyendo accidente cerebrovascular, inflamación de las arterias en el cerebro (vasculitis) y sangrado interno del cerebro interno. Ahora, alertan estos expertos, puede agregarse a la lista el aneurisma de la arteria vertebral.

La droga actúa sobre el sistema nervioso simpático, lo que provoca un alza repentina de la presión arterial como resultado del aumento de la serotonina. Esto podría desencadenar cualquier aneurisma preexistente u otras anormalidades arteriales propensas a la ruptura, advierten esos investigadores.