Las drogas, con independencia del efecto nocivo que muchas tienen sobre el organismo, guardan un poderoso aspecto en común: permanecen largo tiempo en el cuerpo, dispuestas a ser detectadas en una analítica al uso. Pero, ¿de qué estamos hablando: horas, minutos, días…?

Sangre y orina

Si la droga se manifiesta en un fluido, lo hará en el otro. «Cuando una sustancia está en la sangre tiene que pasar por el riñón, que es el que la excreta, de tal forma que la droga permanece en sangre y orina», puntualiza el psiquiatra Gabriel Rubio, del Hospital Doce de Octubre, de Madrid. Los expertos consultados por BUENAVIDA se refieren a la orina como el medio más habitual para averiguar si alguien ha tomado drogas: «La cantidad de sustancia que se acumula en la orina es mayor que en la sangre», añade Ana María Bermejo, catedrática de Toxicología del Instituto de Ciencias Forenses de la Universidad de Santiago de Compostela. Otros matices que influyen en la permanencia de la sustancia son «si es la primera vez que se consume, si es hombre o mujer o las capacidades individuales de cada uno [una multitud de factores, aún por definir, en los que podría participar la genética] para eliminarla», matiza el psiquiatra.

Seguir leyendo >>