Ayer fue publicado el informe European School Survey Project on Alcohol and Other Drugs (ESPAD Report 2015), del Observatorio Europeo de Drogas y Toxicomanías, con sede en Lisboa, que apunta a que los adolescentes creen que las nuevas sustancias psicoactivas (NPS por sus siglas en inglés) son más atractivas que otras drogas.

«En muchos países, las cifras de prevalencia para las NPS sugieren que estas sustancias son más atractivas que drogas tradicionales como anfetaminas, éxtasis, cocaína o LSD», señala el Observatorio en su informe, que se publica cada cuatro años, y en esta ocasión reúne datos de 2015.

De media, el 4 % de los adolescentes europeos ha consumido alguna vez estas nuevas drogas, con las cifras más altas en Estonia y Polonia (10 %) y más bajos en Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Noruega y Portugal (1 %), mientras que España se mantiene en la media.

Las diferencias por género son pequeñas, con una media del 5 % para los chicos y del 4 % para las chicas.

A pesar de la llegada de estas nuevas drogas, el alcohol y el tabaco siguen siendo las sustancias más consumidas por los adolescentes, aunque en 2015 continuó la tendencia a la baja registrada en los años anteriores.

El 22 % de los encuestados fumó cigarrillos en los últimos 30 días y el 13 % admite consumir tabaco a diario, en ambos casos el dato más bajo desde que se comenzó a elaborar este informe, en 1995.

En cuanto al alcohol, el 47 % consumió alguna bebida alcohólica en el último mes y el 81 % ha bebido alcohol al menos una vez en su vida, también las cifras más bajas desde 1995.

Aunque tradicionalmente el consumo de estas sustancias era mayor en los chicos que en las chicas, la brecha de género es cada vez menor, según el Observatorio, que avisó de que el cannabis sigue siendo una droga «establecida» y el 7 % de los adolescentes europeos asegura haberlo consumido en el último mes.

También alertó de que el acceso al alcohol y el tabaco por parte de los menores de edad es «relativamente fácil» a pesar de las restricciones legales.

«Puede observarse una tendencia general a la baja en el uso de alcohol y tabaco entre los adolescentes. Sin embargo, pese a la estricta normativa sobre el tabaco en la mayoría de los países y sobre el alcohol en algunos, los adolescentes todavía tienen un acceso relativamente fácil» a estas sustancias, recoge el informe.

En concreto, el 61 % de los encuestados declaró que podía conseguir cigarrillos sin problemas y el 78 % alcohol.

Estos porcentajes son significativamente mayores en España, donde el 78 % de los adolescentes cree que es sencillo conseguir tabaco -sólo superado por República Checa y Austria- y el 92 % puede acceder sin dificultades a bebidas alcohólicas, por detrás de Dinamarca y a la par que República Checa.

España también está entre los primeros puestos en el fácil acceso al cannabis (45 %, frente a la media europea del 30 %), pero no en el éxtasis, donde se sitúa bajo la media (10 % frente a 12 %).

Además del consumo de drogas, el documento también analiza otros comportamientos adictivos entre los adolescentes, como el uso de internet, y los juegos y las apuestas online.

En ese sentido, los jóvenes encuestados se conectaron a internet 5,8 días a la semana, con cifras superiores especialmente en los países nórdicos.

Principalmente, los adolescentes utilizan internet para conectarse a las redes sociales y mantener el contacto con amigos, para buscar información, para descargar contenidos y, en un porcentaje menor, para comprar o vender productos.

Más de un quinto de los estudiantes usan el ordenador regularmente para jugar y un 3 % admite utilizarlo para entrar en webs de apuestas online, caso en el que los chicos (6 %) superan ampliamente a las chicas (1 %).

El estudio concluye que el consumo de drogas y las apuestas online no deben considerarse dos problemas separados, ya que habitualmente están asociados, por lo que es necesario un esfuerzo mayor para evitar que los adolescentes se sientan atraídos por estas actividades.