Nota: artículo original publicado en infosalus.com

El número de países que han aprobado medidas contra el tabaco se ha cuadruplicado en los últimos 10 años, estando actualmente el 63 por ciento de la población mundial protegida frente a este hábito por, al menos, una medida legislativa, según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la ‘Epidemia de Tabaquismo’.

En la actualidad, 4.700 millones de personas viven en zonas donde se ha aprobado alguna medida de control del tabaco derivada del Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco como, por ejemplo, la conocida como ‘Mpower’, establecida en 2008 para promover la vigilancia en el consumo de tabaco y las políticas de prevención, proteger a la población del humo, ofrecer ayuda a los fumadores para abandonar el hábito, advertir de los peligros que conlleva fumar y hacer cumplir las prohibiciones publicidad, promoción y patrocinio del tabaco.

En este punto, la OMS ha advertido de que la industria tabacalera sigue entorpeciendo los esfuerzos de los gobiernos por aplicar plenamente intervenciones que pueden salvar vidas y ahorrar costos, según se indica en el nuevo Informe OMS sobre la epidemia mundial de tabaquismo, 2017.

«Los gobiernos de todo el mundo no deben perder tiempo en incorporar todas las disposiciones del Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco en sus programa y políticas nacionales de control del tabaco. También deben atajar el comercio ilícito de tabaco, que exacerba la epidemia mundial de tabaquismo y sus consecuencias socioeconómicas y sanitarias. Colaborando entre sí los países pueden impedir que millones de personas mueran cada año por enfermedades provocadas por el tabaco que pueden prevenirse, y ahorrarse cada año miles de millones de dólares en gastos sanitarios evitables y en pérdida de productividad», ha comentado el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

De hecho, tal y como ha recordado el embajador mundial de la OMS para las enfermedades no transmisibles y fundador de Bloomberg Philanthropies, Michael R. Bloomberg, los progresos logrados en todo el mundo, que quedan patentes a lo largo del informe, muestran que es posible que los países consigan cambios «importantes».

Incluso los países con recursos limitados pueden vigilar el consumo de tabaco y aplicar políticas de prevención. A juicio del organismo, al generar datos sobre los jóvenes y los adultos, los países pueden, a su vez, promover la salud, ahorrar en costos sanitarios y generar ingresos para los servicios públicos.

Asimismo, la OMS ha insistido en que la vigilancia sistemática de la injerencia de la industria tabacalera en la tarea normativa del gobierno protege la salud pública al arrojar luz sobre las tácticas de la industria tabacalera. Entre ellas destacan exagerar el peso económico de la industria tabacalera, desacreditar los datos científicos demostrados y servirse de la litigación para intimidar a los gobiernos.

«Los países pueden proteger mejor a los ciudadanos, en particular a los niños, de la industria tabacalera y sus productos mediante sistemas de vigilancia del consumo de tabaco», ha apostillado el director del Departamento de la OMS para la Prevención de la Enfermedades no Transmisibles (PND), Douglas Bettcher.

Finalmente, el informe de la OMS ha puesto de manifiesto que ocho países, entre los que figuran cinco países de ingresos bajos y medianos, han aplicado cuatro o más medidas de ‘MPOWER’ al más alto nivel (Brasil, Irlanda, Madagascar, Malta, Panamá, Turquía, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y República Islámica de Irán); si bien Nepal, la India y Filipinas se encuentran entre los países que aplicaron iniciativas con el apoyo de la OMS para vigilar el consumo de tabaco y, posteriormente, pusieron en marcha medidas para proteger a la población del tabaco.