Detrás de cada accidente de tráfico hay una historia cruel. Sueños y vidas que se ven truncados por un despiste o por una mala decisión. El relato se vuelve aún más dramático si los tristes protagonistas son jóvenes con toda la vida aún por delante. El último ejemplo lo podemos encontrar el pasado fin de semana, cuando dos jóvenes franceses fallecieron en un accidente en la N-121-A a la altura de Behobia. O el del hondarribiarra Xabier Garmendia que perdió la vida a comienzos de semana en otro siniestro de tráfico ocurrido en el estado mexicano de Baja California.

Al igual que a ellos, la desgracia también ha cogido por sorpresa a muchos jóvenes en las carreteras. A pesar de las campañas de concienciación y las cada vez más severas multas, para los responsables de la seguridad vial las cifras de accidentes en los que los menores de 30 años se ven implicados aún son «alarmantes». No obstante, la fotografía de esta última década ha dado un giro sustancial en Guipúzcoa. Se ha registrado la mitad de siniestros con personas implicadas que tenían entre 0 y 24 años de edad. Pero los focos de la Dirección General de Tráfico (DGT) siguen puestos en reducir estos números. Para ello, en más de una ocasión ha deslizado la posibilidad de implantar la tasa cero al volante para los conductores noveles y profesionales.

1.003 jóvenes de entre 0 y 24 años se vieron implicados en accidentes en las carreteras guipuzcoanas el año pasado, según los datos aportados por la Ertzaintza. Se trata de un número notablemente más bajo si se observan las cifras de 2003, cuando 2.848 jóvenes estuvieron involucrados en algún tipo de siniestro. Desde esa fecha, el número ha ido descendiendo paulatinamente. Seguramente, espoleado por las campañas de concienciación que han puesto en marcha desde la DGT o el departamento de Seguridad del Gobierno Vasco.

El año 2009 se consiguió bajar de la barrera de los 2.000 implicados en accidentes de tráfico cuando en Guipúzcoa 1.922 jóvenes sufrieron algún tipo de percance con el vehículo. Eso sí, la cifra más baja se registró en 2005 cuando fueron 889 las personas entre 0 y 24 años las que tuvieron algún percance. A pesar de este pico descendente, por primera vez en catorce años, el pasado ejercicio registró un aumento en los siniestros. Frenando en seco la tendencia a la baja y alertando a las autoridades competentes.

En el conjunto de Euskadi, los últimos años también se ha conseguido ir reduciendo la tasa de siniestros de manera paulatina. De los 6.875 siniestros con jóvenes que se produjeron en 2003 se ha descendido a los 2.463 del año pasado. La misma tendencia siguen tanto en Bizkaia como en Álava. En las carreteras vizcaínas, hace catorce años, se contabilizaron 3.306 siniestros con jóvenes implicados, mientras que el año pasado la cifra cayó hasta 1.092. Más de la mitad. En Álava por su parte ha descendido de los 721 a los 368.

Esta tendencia a la baja también se refleja en la mayoría de carreteras del Estado. Los conductores jóvenes, de entre 16 y 29 años, constituyen el grupo de edad que ha experimentado una mayor reducción en el número de fallecidos por siniestralidad vial de los últimos diez años, con una tasa de descenso de un 75%, cuando la media general en España se sitúa en un 56%, según un informe publicado por la Fundación Mapfre sobre ‘Jóvenes y Seguridad Vial’.

Seguir leyendo >>